"Es mi cuarto año en seminarios y he vivido muchos retos para siempre asistir a clase. El año pasado tuve desafios con mi tiempo, ya que debía prepararme en la academia para ingresar a la universidad y descuide un poco mi asistencia a seminarios. Tenía la presión de cumplir con mis responsabilidades del colegio, la academia y seminarios, sentí que a veces no podía con todo. Daba prioridad a mis estudios en la academia pues me serviría para mi progreso temporal y descuidaba seminarios." nos cuenta Alexandra Segovia de 17 años de edad.
"En esta incertidumbre busqué respuestas y pidiendo al señor encontré Mateo 6:33: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”. Decidí asistir fielmente a seminario y encontrar otras maneras de equilibrar mi tiempo."
“Siento que al ir a seminarios tendremos la fortaleza diaria para afrontar las pruebas y que si obedecemos al señor, nos dará bendiciones que necesitamos. Ahora puedo distribuir mejor mi tiempo y el señor me fortalece en mis estudios de la academia.” sostiene Alexandra.
El programa de estudio “Seminarios” esta dirigido a los jóvenes de 14 a 17 años de todo el mundo. Permite ayudar a los jóvenes a conocer más a Jesucristo y acercarse más a él. Son cuatro años consecutivos y en cada año se estudia un libro diferente. Se estudía la Biblia tanto El Antiguo Testamento como el Nuevo Testamento. También se incluyen El Libro de Mormón otro testamento de Jesucristo y Doctrina y Convenios e Historia de la Iglesia que trata de las revelaciones dadas al Profeta José Smith y de la restauración la Iglesia.
Llegar a conocer a nuestro Padre Celestial y a Jesucristo
Recientemente se le preguntó a un grupo de jóvenes en qué forma seminario había sido una bendición para ellos. Sus respuestas revelan un tema importante: que seminario los ayuda a acercarse al Padre Celestial y al Salvador. El élder David A. Bednar, del Quórum de los Doce Apóstoles, ha enseñado: “Todos los temas que estudien en seminario son importantes. Cada año, al centrarse en uno de los volúmenes de las Escrituras, el enfoque central es el Señor Jesucristo”9.
A continuación se encuentra lo que varios de los adolescentes dijeron en cuanto a la forma en que seminario los ha acercado a Jesucristo.
- “He aprendido lo que el Salvador hace por mí al leer todos esos relatos de tantos profetas y al reconocre lo importante que soy para Él. Me doy cuenta de que me amó lo suficiente para morir y sufrir por mi dolor”.
- “Seminario es una manera excelente de iniciar mi día. No importa lo cansado que me encuentre, siento el Espíritu y me siento fortalecido de modo que cuando surgen dificultades durante el día, sé sin ninguna duda que mi Salvador me ama y tengo más confianza para defender lo correcto”.
- “Soy conversa a la Iglesia. Empecé a asistir a seminario incluso antes de bautizarme. Sin seminario, no sé si me habría bautizado; sin seminario, no tendría al Salvador en mi vida en estos momentos, ni sabría que mis pecados pueden ser perdonados. En realidad, nunca tuve al Padre Celestial o a Jesucristo en mi vida. Seminario me ayudó a encontrarlos y a que siempre formen parte de mi vida y de la vida de mis futuros hijos”.
- “Ir a seminario todos los días me ayudó a acercarme a mi Señor y Salvador Jesucristo al aprender acerca de Sus enseñanzas, del gran amor que tiene por mí y de cómo puedo volver a vivir con Él”.
- “Seminario me enseñó a leer las Escrituras y no sólo a disfrutarlas, sino también a encontrar el modo de aplicarlas. Aprendí doctrinas y principios que me ayudaron a fortalecer mi testimonio de un amoroso Padre Celestial y de Jesucristo, lo cual llevaré conmigo el resto de la vida”.
Con tantas bendiciones que derivan del asistir a seminario, es fácil ver por qué los jóvenes de todo el mundo lo consideran una prioridad en sus vidas.